La variante ómicron ha impulsado la aprobación de la vacunación a niños y niñas menores de 12 años en el mundo, y República Dominicana no es la excepción. Esta es la razón que pesó este jueves para que el Gobierno dominicano aprobara el comienzo de la inoculación contra el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, que provoca el COVID-19, en esta población.
Así lo afirmó el presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD), el doctor Senén Caba, quien aseguró que la decisión de vacunar a niños de este rango de edad fue unánime en la reunión en que participó la tarde de este jueves con representantes de otras sociedades especializadas, encabezada por el Gabinete de Salud en el Palacio Nacional.
«El ómicron está afectando a los niños más que otras variantes. Los niños no tienen ninguna protección y han empezado a contagiarse y a ocupar un número mayor de camas», sostuvo Caba.
Según la data compilada en Plataforma pública de datos COVID-19 en RD, actualizada hasta el 11 de enero de 2022, un total de 95,001 niños y niñas entre 0 y 11 años han sido diagnosticados con la enfermedad. De estos, han fallecido 18 infantes y 225 casos han sido confirmados en este rango de edad en los primeros diez días de este año.
De acuerdo con la información ofrecida por la coordinadora del Gabinete de Salud, la vicepresidenta Raquel Peña, tras finalizar la reunión, que los infantes de entre 5 y 11 años comprende una población de 1,378,000 niños y niñas. La vacunación para los menores de 12 años hasta los 5 años empezará el próximo 7 de enero y deberá contar con el consentimiento de los padres.
Caba informó al conversar con Diario Libre que se comenzará la vacunación contra el COVID-19 en niños y niñas con condiciones de salud de riesgo ante una infección con el nuevo coronavirus: asmáticos, con síndromes autoinmunes, cánceres, obesos y diabéticos. Explicó que recibirán una dosis de la vacuna de Sinovac, igual a la de los adultos.
Agregó que en los próximos días se elaborará el protocolo a seguir para esta inoculación. Indicó, además, que se establecerán puestos de monitoreo para hacer pruebas a los niños en las escuelas.