En 1838 Juan Pablo Duarte funda la Sociedad Secreta La Trinitaria, dedicada desde el primer momento a una intensa labor propagandística con el fin supremo de lograr la separación o independencia del Estado haitiano.
Al momento de la fundación de la Trinitaria, en Haití venían ocurriendo hechos políticos y sociales que amenazaban con un cambio de gobierno. Duarte, como fino estratega, ve una oportunidad de aliarse a liberales haitianos para producir el derrocamiento de Boyer, y así, debilitado o derrotando al dictador que mantenía ocupada la parte de nuestro país desde 1822, lograr los objetivos patrios definidos por los trinitarios.
Para producir un acuerdo con los liberales haitianos, Duarte envía primero a Juan Nepomuceno Ravelo a Aux Cayes, centro de la conspiración haitiana. Esta gestión no tiene resultados positivos y entonces el patricio envía a Matías Ramón Mella quien logra un acuerdo favorable con los liberales haitianos. “De este modo vinieron a quedar haciendo causa común contra los absolutistas, el elemento liberal haitiano y el elemento separatista dominicano».
Esta alianza no dura mucho tiempo pues el gobierno haitiano desata una agresiva campaña contra los Trinitarios, acusándolos de que querían la separación de la parte dominicana para volver a esclavizar a los haitianos.
Esta campaña tiene sus efectos y los liberales dominicanos y haitianos entran en contradicciones.
A inicios de marzo del 1843, Boyer es derrotado por un movimiento revolucionario encabezado por el general Charles Hérard. Este movimiento recibió el nombre de La Reforma. Del 24 al 26 de marzo de 1843 se producen actos masivos de protestas en la ciudad de Santo Domingo en apoyo al derrocamiento de Boyer.
Producto de esos hechos, Duarte y Los Trinitarios deponen al general Carrié quien gobernaba la ciudad de Santo Domingo, y se constituye una Junta Popular de cinco miembros constituida por: Alcius Pontieux y Jean Baptiste Morin, por los haitianos y Juan Pablo Duarte, Manuel Jiménez y Pedro Alejandrino Pina por los dominicanos.
El nuevo gobierno haitiano convoca elecciones municipales para el 15 de junio del 1843 a los fines de elegir los diputados que conformaran a partir del 15 de septiembre de ese año, la Asamblea Constituyente, que tendría como principal objetivo aprobar una nueva constitución liberal acorde con los propulsores del movimiento reformador que derrocó a Boyer.
El 15 de junio, se celebran las elecciones en las que se denunciaron todos los recursos de la “malicia y de la mala fe como el cohecho y la imposición oficial por parte de sectores gubernamentales” según denuncia José Gabriel García en la obra ya citada.
Sin embargo, los Trinitarios ganaron abrumadoramente esas elecciones, alzándose con el control de las municipalidades o ayuntamientos en la mayoría de las ciudades en la parte este de la Isla: Santo Domingo, Santiago, Macorís (San Francisco), Cotuí, El Seibo, Higüey, Baní, entre otras.
En la ciudad de Santo Domingo fueron parte de la nueva municipalidad Domingo de la Rocha, Manuel Jiménez, Julián Alfau, Félix María Ruiz, José María Serra y Pedro A. Bobea, quienes juegan roles importantes en el proceso de separación con Haití.
Las elecciones del 15 de junio escogieron 620 electores en toda la isla y estos a su vez eligieron al mes siguiente a 124 constituyentes. De ese total de constituyente, según relata Emilio Rodríguez Demorizi, correspondieron a la parte Este de la isla, o lo que es hoy República Dominicana los siguientes:
Azua: Charles Picart y Buenaventura Báez;
Puerto Plata: Toribio López Villanueva y Federico Peralta.
San Juan: Antonio Justo Chanlatte;
La Vega: Charles M. Western, Thomas Press y Joseph Alexandre Dupuy;
Santiago: Miguel Ángel Rojas, Manuel Ramón Castellanos, Pierre Bargés, Antonio Martínez Valdez, Francisco Dorville y Charles Devimeaux;
Santo Domingo: David Saint-Preux, Juan Nepomuceno Tejera, Remigio del Castillo, Alcius Pontieux, José Santiago Díaz de Peña, Manuel María Valencia, P. Barjon Fils, Domingo Benoit y Francisco Javier Abreu.