Airbnb es una compañía que ofrece una plataforma digital dedicada a la oferta de alojamientos a particulares y turísticos (alquiler vacacional) mediante la cual los anfitriones pueden publicitar y contratar el arriendo de sus propiedades con sus huéspedes; anfitriones y huéspedes pueden valorarse mutuamente, como referencia para futuros usuarios.

 En República Dominicana, por ser un país con potencial turístico, existen diversos tipos de alojamiento para quienes vienen a vacacionar. No solamente, están los hoteles o instalaciones que están debidamente reguladas y autorizadas por los entes del Estado competentes en esta materia, también existe otro tipo de infraestructuras que ofrecen habitaciones temporalmente, a través de plataformas digitales, que todavía en la nación operan sin ningún tipo de formalidad. 

Si bien los diferentes gremios del sector turístico formal reconocen que el alquiler de habitaciones o apartamentos a los turistas ofrece alternativas, se pide una regulación que permita una competencia sana y garantías de calidad y seguridad para el visitante. 

Según datos ofrecidos por el Gabinete de Turismo, entre enero y noviembre del año 2021, la llegada de turistas fue de 4,263,259 visitantes no residentes. El 73% de los no residen- tes extranjeros se alojó en hotel, mientras que los denominados aventureros representaron el 27% del total, alojándose en otro tipo de instalaciones. 

De acuerdo con AirDNA, una firma de investigación de mercado especializada en Airbnb, en el Distrito Verón-Punta Cana, la plataforma registra 3,382 alojamientos de alquiler activos con un promedio de ocupación de 33%, siendo una de las zonas más activas del país en este tipo de alojamientos, principalmente de Airbnb. 

En octubre del año pasado, el vicepresidente ejecutivo de la Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana (Asonahores), Andrés Marranzini, dijo que el Gobierno tiene una oportunidad para captar ingresos sin lesionar la dinámica ya instaurada, a través del establecimiento de impuestos y controles a las plataformas de renta de habitaciones, mejor conocidas como Airbnb. 

Indicó que en ese sector hay una oportunidad de regulación y nuevos ingresos para el Gobierno, al tiempo que la regulación de esta plataforma electrónica garantías de seguridad el turista. 

En Verón-Punta Cana, la demarcación que recibe el mayor de turistas, los alojamientos de Airbnb oscilan por día de entre 75 y 225 dólares la noche, dependiendo del espacio de lugar, el número de personas y los servicios que contienen (área de piscina, estufa, nevera, internet, traslados, cercanías con locales, playas y plazas comerciales). 

La mayoría de estas instalaciones, en ese distrito, se ubican en Bávaro, específicamente en Los Corales, El Cortecito, White Sand y en las avenidas España y Alemania. 

Algunos encargados de esos alojamientos, consultados por este medio, dicen que los meses en que más tienen clientes son entre noviembre y abril.