En la vista pública realizada en el ayuntamiento municipal de Oviedo dentro del marco del estudio de impacto ambiental del proyecto Aeropuerto Internacional de Cabo Rojo asistieron moradores, dirigentes comunitarios y políticos, y grupos de ambientalistas quienes expresaron sus preocupaciones sobre el proyecto.

La mayoría de los que acudieron a la convocatoria se presentaron como moradores de Los Tres Charcos y se quejaron de que el gobierno no les ha pagado lo que les debe por la compra de los terrenos donde se pretende iniciar la construcción del aeropuerto.

Sostuvieron que los terrenos de la zona desalojada pertenecían a ganaderos y agricultores, los cuales con el desalojo se les prohibió continuar con la cría de animales o seguir sembrando, por lo que advirtieron que se quedaron sin cosechas ni productos agropecuarios lo que ha hecho crecer el descontento y la renuencia hacia el proyecto. También expresaron su reticencia por el proyecto, ya que hasta ese momento, nadie les había mostrado los planes de desarrollo en la zona.

“Le damos la bienvenida al proyecto y estamos muy interesados en él, pero nos surge una interrogante y es, cuándo le van a pagar los terrenos a las personas que han desalojado”, manifestó Marte.

Mano de obra

Otra de las preocupaciones que les quita el sueño a los residentes de Oviedo es la probable llegada de mano extranjera durante y posterior a la construcción del aeropuerto. Temen que no se tome en cuenta a los residentes de la comunidad de Oviedo, y así lo indicaron efusivamente en medio de la vista pública y recalcaron que ya ha sucedido en ocasiones anteriores con proyectos de extracción de maderas preciosas los cuales han dejado al pueblo más pobre de lo que estaba.