Por: Juan Nina
Es el grito desesperado de cientos de Petromacorisanos que cada día van en busca de servicios de salud al hospital Antonio Musa; en este centro más que garantizar la salud es un detonante de insalubridad nauseabunda, hedo, suciedad, según denuncian algunos pacientes.
Este centro Regional construido para brindar salud a la región este del País, se encuentra sumergido en el abandono y en una remodelación de nunca acabar. Allí el óxido en los asientos, las aguas residuales próximo a la entrada de la emergencia y filtraciones, para muchos es algo normal.
Techos desplomados, cristales rotos, consultorio con el piso abandonado y la falta de gerencia hacen que este hospital Antonio Musa, sea considerado para quienes denuncian la antesala de la muerte.
Ante estas denuncias este equipo trató de comprobar la veracidad de que en algunas habitaciones hay insectos, hedor e insalubridad; pero bajo amenaza no se nos permitió grabar dentro del centro hospitalario, e impidiéndonos incluso preguntar a los pacientes.
Luego de dos horas de espera el director del referido centro médico Alberto Betances, salió a recibir el equipo, sin embargo, dijo que, se podía entrar, pero sin cámara para grabar, mostrando algunas áreas, limitándose sólo a los espacios que recientemente fueron remodelado y justificando la condición infrahumana en que opera el hospital
Al recorrido que se refiere el galeno, pudimos contactar personal de la construcción transitar con carretas de arena entre los pacientes, el ascensor fuera de servicio, montones de escombros en los pasillos y techos colapsados.
Aquí en el hospital DR. Jaime Oliver Pino, es un panorama similar, aberturas en el techo, filtraciones, oxido, pacientes en camillas en los pasillos por falta de camas y suciedad.
Montones de camas inservibles, puertas despegadas, moscas y paredes ensangrentadas. Este centro de salud también está siendo sometido a remodelación, donde hay varias áreas que están en perfectas condiciones y que si cumple con estándares de calidad.
A pesar de operar con ciertas deficiencias en algunas áreas, el servicio gerencial y del personal médico es bien valorado por pacientes. Se recuerda que la salud sigue siendo un derecho fundamental y que debe ser garantizado por los gobernantes.
Mientras tanto el gobierno y las autoridades de salud escuchen las denuncias de cientos de pacientes que acuden a los centros hospitalarios Antonio Musa y Jaime Oliver Pina, los petromacorisanos continuarán recibiendo los servicios en la insalubridad, el hedor y el abandono.
