La excanciller de Alemania Angela Merkel lanzó el jueves una inusual crítica pública a su sucesor como líder del centroderecha del país, que es el favorito en las elecciones generales de febrero, por presentar en el Parlamento propuestas para nuevas y estrictas normas migratorias que sólo se aprobaron con la ayuda de un partido de ultraderecha.
Los partidos en el gobierno de centroizquierda del país, han puesto en duda si se puede seguir confiando en que el líder conservador, Friedrich Merz, no llevará al partido de ultraderecha Alternativa para Alemania, o AfD, al gobierno tras lo sucedido el miércoles. Insiste en que no lo hizo ni lo hará, y que no rompió un consenso político, a menudo llamado “cortafuegos”, para rechazar al partido. Pero el canciller Olaf Scholz subrayó que Merz cometió “un error imperdonable”.
Merz, decidido a subrayar el compromiso de su bloque para reducir la migración irregular tras el letal ataque con arma blanca perpetrado por un solicitante de asilo rechazado la semana pasada, sometió a votación una moción no vinculante en que se pedía a Alemania que devuelva a muchos más migrantes en sus fronteras, aunque podía necesitar los votos de AfD para sacarla adelante. La medida se aprobó por un margen de tres votos gracias al apoyo del partido de ultraderecha.